El ámbar natural tiene fama mundial por su belleza y propiedades curativas. El hombre descubrió el ámbar y empezó a utilizarlo hace no menos de 6.000 años. Sin embargo, en la época neolítica lo usaban de un modo diferente y más práctico al que se le da en la actualdiad a este material. No había en aquel entonces ni pendientes, ni collares, ni cigarreras de ámbar. El hombre, con su ayuda, encendía el fuego.
“Mucha gente dice que el ámbar es una piedra. Pero no lo es. Claro podemos decir que es una piedra natural, porque es la resina que salía hace millones de años de los árboles que crecían en el territorio de la actual Escandinavia. Entonces hubo un calentamiento y los pinos empezaron a expeler resina, que era tan líquida que se escurría por los troncos. Luego hubo un congelamiento y la resina se solidificó y ese es el ámbar que vemos ahora”, explica el proceso de la aparición del mineral Regina Makauskene, una empleada del museo del ámbar de Lituania.